En abril de este año se puso en marcha, en el marco del Consejo Provincial de la Mujer, el área de Diversidad Sexual, con el objetivo de canalizar acciones de promoción, con una positiva respuesta de parte de los vecinos de las distintas localidades cuya participación activa dio lugar a la organización de encuentros provinciales de Diversidad LGBT, permitiendo además, que este año Río Negro sea elegida sede del Tercer Congreso Nacional, en diciembre.
“Hemos llevado adelante un programa de acciones de sensibilización, sumando en las políticas a un Colectivo que va en pleno crecimiento y que, al igual que el resto de la población, merece que sus inquietudes, necesidades e intereses sean canalizados a través de un Estado presente, que garantice la integración social y la igualdad”, resaltó el ministro de Desarrollo Social, Nicolás Land.
Es así que, luego de la oficialización del área de Diversidad, se incorporó para su conducción al primer varón trans a la Administración Pública Provincial.
“Las actividades de sensibilización ya alcanzaron a más de 4000 personas en el ámbito educativo, comunidad en general y agentes públicos; con talleres y distribución de folletería específica para el reconocimiento de derechos. Esto contará con la colaboración de agentes multiplicadores, entre ellos estudiantes de las escuelas secundarias de la provincia”, dijo.
Por otra parte, destacó las acciones a favor de la población LGBT que se concretan a través del Consejo, con asistencia y seguimiento a personas en situación de vulnerabilidad, gestión de alojamiento, aportes económicos para situaciones de calle, incendio de casillas y alimentación. Además, se estableció un cupo de pasajes para traslados de emergencia de una localidad a otra, y el constante acompañamiento y contención por parte de equipos profesionales.
“Días atrás se concretó el primer cambio registral de un niño trans en la localidad de General Roca, en articulación con otros organismos provinciales”, comentó el Ministro. "Es la primera vez que el Estado acompaña este tipo de requerimiento, que muchas veces resulta tan difícil para las familias, porque no se cuenta con suficiente información al respecto".
Luego, resaltó que “las personas trans tienen un promedio de vida de entre 35 y 40 años, hay una importante relación entre la exclusión, la discriminación y la corta expectativa de vida. Algunos de ellos sufren desde muy temprana edad, y otros deben enfrentar la pobreza, la exclusión social y los problemas de acceso a la vivienda, a la educación y al trabajo”.
“Por eso, desde la provincia nos proponemos combatir la discriminación, exclusión, homofobia y transfobia, impulsando políticas inclusivas; eso también habla de desarrollo institucional y calidad de vida”, concluyó Land.